La noche está quieta como si los árboles
se hubiesen detenido
Acaba de parar un taxi en el portal
Me escuecen los ojos de las manos
Me lloran las yemas de los pies
Tengo náuseas
Hace frío como para taparse y no
Porque luego el sudor detrás de la nuca
descendiendo la espalda
y calor
Tem
blo
res
Solo un mensaje
Palabras como espaldas
Espadas como ovarios
A las cinco de la madrugada
Me duele el pecho como si una bala
perforase mis órganos inevitables
Algo sangra en esta cama
Algo acaba de estornudar
-Jesús-
y no soy yo
No hay comentarios:
Publicar un comentario