indefensa y redonda
me orquesto en el calor y luego nado
lucho con mis alas gigantes de colibrí ansioso
vibro en esta silla giratoria y
qué martirio es verte lejos
temblar en tus pupilas
clavar la estaca
soñar el tacto
uñas del último verano
que ya no son de nadie y estos pies
dime para qué os quiero
cómo cojones los uso
y la espalda
a quién sostiene a quién
si me faltas tú mano garra de siempre
puñal de plata
hoy los libros son náusea
no estoy loca pero la verdad es que sí
quiero crímenes vejaciones
desgarrar palabras hasta que
duelan todos los adverbios de golpe
violar es un verbo amable
solloza entre silencios otra piel
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